Orígenes de la musicoterapia.
La utilización de la música como terapia hunde sus raíces en la prehistoria, se sabe que la música estuvo presente en los ritos mágicos, religiosos y de curación.
Sin embargo, los primeros escritos que aluden a la influencia de la música sobre el cuerpo humano son los papiros egipcios ( soporte de escritura elaborado a partir de Cyperus papyrus, una hierba palustre acuática ) descubiertos en el año 1889.
Estos papiros datan de alrededor del año 1500 a. C y en ellos ya se racionaliza la utilización de la música como un agente capaz de curar el cuerpo, calmar la mente y purificar el alma.
¿Qué es la musicoterapia?
según La Federación Mundial de Musicoterapia, se refiere al uso de la música y/o sus elementos (sonido, ritmo, melodía, armonía) realizado por un musicoterapeuta calificado con un paciente o grupo, en un proceso creado para facilitar, promover la comunicación, las relaciones, el aprendizaje, el movimiento, la expresión, la organización y otros objetivos terapéuticos relevantes, para así satisfacer las necesidades físicas, emocionales, mentales, sociales y cognitivas. Tiene como fin desarrollar potencialidades y/o restaurar las funciones del individuo de manera tal que este pueda lograr una mejor integración intra y/o interpersonal y consecuentemente una mejor calidad de vida a través de la prevención, rehabilitación y tratamiento.
El fin último de la terapia aplicada al TEA no es solo mejorar la calidad de vida de estas personas, sino también facilitar su adaptación a la vida en sociedad. Esto es así porque mejora las carencias o dificultades comunicativas y de interacción social que son características del trastorno.
Se parte de la premisa de que mediante la práctica musical con fines terapéuticos se puede ayudar tanto a niños como a adultos con TEA de una forma amena y dinámica.
Musicoterapia en el trastorno del espectro autista
A raíz de la práctica en musicoterapia en el trastorno del espectro autista con niños y adultos, los principales efectos positivos y beneficios que se han encontrado son:
- Mejora en la producción del habla y de la comprensión del lenguaje.
- Disminución y modificación de las estereotipias vocales mediante el canto.
- Mejoría de habilidades comunicativas no verbales y gestuales.
- Reconocimiento de palabras, grafías y conceptos y habilidades de preescritura.
- Fomento de la imitación.
- Incremento del respeto, la reciprocidad social, la atención conjunta, la empatía, el compromiso y la cooperación.
- Mejora del reconocimiento de las señales afectivas.
- Aumento del contacto visual y el inicio espontáneo de interacciones sociales.
- Reducción de comportamientos como las autoagresiones, la agresividad o las conductas estereotipadas.
- Aumento de la flexibilidad, la creatividad y la tolerancia al cambio.
- Incremento de la memorización y el conocimiento de secuencias de acontecimientos.

Nuevos retos de la musicoterapia en el trastorno del espectro autista
La musicoterapia es una práctica útil y eficaz en el campo de las terapias. Su aplicación ayuda a abrir canales de comunicación con las personas con TEA.
Como toda terapia, toda actividad planteada dentro de la intervención tiene su motivo u objetivo, y por ello las sesiones deben ser cuidadosamente preparadas.
Todo esto tiene una finalidad clara: conseguir una intervención integral que ayude a las personas con TEA a participar en la sociedad y mejorar su calidad de vida.

Texto extraído de La mente es maravillosa
Adaptado por Metele Vida